Equiparación de asignaciones familiares -
reconocimiento de antigüedad de becarios
¡que se haga justicia!
¡que nos devuelvan lo que nos robaron!
Todo lo que obtenemos siempre es producto de nuestra organización y lucha. La movilización es decisiva, pero no despreciamos, al contrario, propiciamos, usar todas las herramientas que creamos útiles para nuestros reclamos. Entre ellas, presentaciones administrativas y judiciales, como en este caso, para reclamar contra el estado provincial cada vez que nos robó parte de nuestros salarios y derechos.
La justicia nos da la razón.
Ante una demanda presentada por la CTA y sus sindicatos, un fallo de la Suprema Corte provincial condenó al estado a abonar a los trabajadores del poder judicial que hayan cobrado asignación familiar entre 1992 y junio de 2004, la diferencia entre lo que pagaba nación y provincia. Por ejemplo, hasta esa fecha, cobrábamos $9 por hijo, mientras para nación y privados había ido aumentando a $20, $30 y $40. Con ese antecedente, seguramente será favorable lo referente a ATE, que obra en el Juzgado contencioso nº 2 de La Plata, con nº de expediente 3640. Este robo a nuestros haberes, volvió a ser ejecutado por Scioli entre octubre de 2009 y febrero de 2010 (siguiendo con el ejemplo, por hijo debió pagar $220 y siguió pagando $180). No se lo dejemos pasar.
Por otra parte, trabajadoras del IOMA que antes de estar en planta permanente trabajaron años bajo la precaria figura de “practicante rentada”, sin aportes, reclamaron judicialmente y ganaron. El fallo obligó al IOMA y por ende al estado provincial, a reconocer la antigüedad y los aportes jubilatorio por todo el período que trabajó sin que se respete su condición de trabajadora efectiva. La situación es idéntica a la de miles y miles de laburantes hospitalarios que ingresaron como becarios, y de tantos otros.
Estos fallos hacen que el gobierno analice vía leyes o acuerdos paritarios, cumplir de ahora en más su obligación y reconocer esto pero tratando de zafar de pagar en forma retroactiva y actualizada, sus deudas con los trabajadores. Eso es precisamente lo que exigimos en las presentaciones que todos los afectados deberíamos llenar y presentar. No debemos permitir que nos roben.
